MEJORES PELÍCULAS 2021


Tercera y última parte de las entradas sobre lo mejor de 2021. En esta última ocasión hablamos de cine. Cabe destacar que no solo voy a hablar de películas que se pueden ver a través de plataformas de streaming, sino que también de muchas que solo se pueden ver (o se han podido ver) en salas de cine. 

Desde la pandemia por Coronavirus el cine no pasa por su mejor momento, sobre todo en cuanto a ir a las salas se refiere. Pero aquí estamos para defender que la cultura es segura y que el cine nunca muere. Y aquí va un repaso por lo que más me ha gustado a mí (repito: a mí) en cuanto a películas estrenadas este año (estreno al público en cualquier parte del mundo). Están ordenadas de abajo a arriba, pero eso no significa que la primera peli que salga sea la peor, sino que es la última de la lista de MEJORES DEL AÑO, bajo mi no solicitado punto de vista.

Repito de nuevo, es mi opinión personal acerca de pelis que he ido viendo desde enero hasta diciembre de 2021. Aunque hay algunas que no he añadido porque no he visto, dado que aún no se han estrenado en España a fecha de escritura de esta entrada (Licorice Pizza, de Paul Thomas Anderson; El callejón de las almas perdidas, de Guillermo del Toro; o Drive My Car, de Ryûsuke Hamaguchi). Y otras tampoco las pondré porque no me ha dado tiempo a verlas, aunque sé que lo más probable es que sean muy buenas (Petit Maman, de Céline Sciamma; o La ruleta de la fortuna y la fantasía, de Ryûsuke Hamaguchi también).

Dicho esto, espero que os guste u os haga ver alguna de estas cintas.

20. Spider-Man: No Way Home (Jon Watts)

Si hay una cinta que lo ha petado este año es esta, sin lugar a dudas. Teniendo un pésimo guion y un humor innecesariamente constante y absurdo, tira más por nostalgia que por calidad y sale ganando. Todo esto haría de esta una mala película, si no fuera por el enorme fanservice directo al corazón del que hace uso, referenciando incluso memes y bromas ya arraigadas a la cultura popular. Eso sí, dándole un final muy interesante a sus personajes. Lo único bueno de Marvel a parte de WandaVision.

19. Encanto (Jared Bush, Byron Howard y Charise Castro Smith)

Para mucha gente ha sido una decepción, y si bien es cierto que algunas canciones no son muy destacables, lo cierto es que en lo personal me ha gustado muchísimo. Me parece, dentro de lo que es a día de hoy Disney, una película bastante íntima y sin viajes, quietista pero emocionante a la vez. La aventura es más interior que exterior, y en mi caso he valorado mucho eso. Me gustan los personajes, me gustan las canciones, me gusta el diseño, todo está bien. Es entrañable, muy graciosa y alentadora. Una fabulosa película para ponerse feliz.

18. The Suicide Squad (James Gunn)

Probablemente la mejor película basada en cómics del año. James Gunn consigue reírse de las películas de superhéroes y al mismo tiempo honrarlas con los mejores recursos de este famoso subgénero. Un humor descarado y fuera de canon, y una violencia extraordinaria. Inclemente con sus personajes y con un estilo muy marcado en sus formas, hace reír y alucinar hasta puntos inimaginables. Una película grande y divertida.

17. Luca (Enrico Casarosa)

Pasamos a Pixar. Frescura es la palabra que define esta ligera y agradable cinta. Refresca el corazón del espectador con una historia de amistad preciosa y bien narrada. La ternura, un mensaje a favor de la diversidad y de la aceptación del "otro" como igual, llenan esta película de alegría y adorabilidad. Toca un tema tan polémico como la inmigración y lo hace con mucha mano y demostrado respeto y admiración. No puedes no verla.

16. Lamb (Valdimar Jóhannsson)

Una de las películas más retorcidas del año. Esta cinta islandesa es una locura de folk horror que, a fuego lento, va incomodando y desquiciando a su público. Con una fotografía impresionante y unos VFX del todo conseguidos, esta cinta es un valle perturbador donde la calma es tan solo la antesala de lo más siniestro que esconde la luz del día. Muy interesante ópera prima del director islandés. Mención especial a la grandísima actuación de Noomi Rapace como protagonista de este drama que tanto aterroriza.

15. Los Mitchell contra las máquinas (Michael Rianda y Jeff Rowe)

Una alucinante aventura familiar que emociona y divierte a partes iguales. Con una protagonista con la que niños y jóvenes pueden sentirse perfectamente identificados, la película desde su arranque hasta su final es un no parar de estímulos y gags adaptados a los tiempos modernos que vivimos. Colorida, explosiva y muy entretenida, Los Mitchell contra las máquinas es la película con más ritmo y emotividad a partes iguales. Una risa tras otra asegurada. 

14. The French Dispatch (Wes Anderson)

Personalmente no soy muy fan de la filmografía de Wes Anderson, pero he de reconocer que esta película, siendo Wes Anderson al cuadrado, me ha encantado, no sé por qué. Me ha hecho gracia, me ha parecido interesante la puesta en escena, los diálogos son muy afilados, las interpretaciones están muy bien (y joder, tiene a todo Hollywood ahí metido). Pero por encima de todo, está muy bien dirigida dentro de su cuadriculado estilo. La única pega que le puedo poner es que la última de las tres historias se me hizo un pelín pesada, el resto está genial.

13. El buen patrón (Fernando León de Aranoa)

La película española del año que ha hecho historia en los Goya con veinte nominaciones. Fernando León de Aranoa crea una crítica social en base a la comedia que la misma genera más que centrándose en la injusticia y el malestar que conlleva. Con un Bardem de sobresaliente a la cabeza del reparto que se come la pantalla por las cuatro esquinas. Si bien es cierto que llega a ser predecible y tiene un par de gags del todo fuera del tono, en un todo la película es pura acidez, recordando a las últimas contribuciones de Berlanga en el cine español.

12. Maligno (James Wan)

Una absoluta ida de olla. Una mezcla de géneros que abarca desde el giallo hasta el polizesco, pasando por el terror sobrenatural, el cine de superhéroes, el gore y el body horror. Este filme está escrito por Akela Cooper, productora y guionista en series como American Horror Story, Luke Cage y Los 100, y basado en una idea original de James Wan y su mujer Ingrid Bisu. En esta ocasión, ya con dinero de por medio, James Wan hace lo que le da la real gana. Se deja llevar por el ímpetu de su frikismo absoluto y su conocimiento sobre el género de terror para exponer, con un estilo muy setentero, una historia grotesca y muy, muy divertida.

11. Last Night in Soho (Edgar Wright)

Edgar Wright es uno de los directores que este año han sacado dos películas (Ridley Scott y Zack Snyder son otros). Esta resulta ser un volantazo en lo que veníamos viendo de él hasta el momento. No tiene nada que ver en cuanto a tono a la trilogía del Cornetto o a Baby Driver (2017). Esta es una cinta mucho más seria y grave en todos sus aspectos; desde lo meramente estético como lo profundamente temático. Anya Taylor-Joy y Thomasin McKenzie brillan y se comen la pantalla, qué grandísimas actrices. La unión de Wrigth con la guionista de 1917 (Sam Mendes, 2019) Krysty Wilson-Cairns, resulta favorable para que la historia no sea solo una aproximación a una realidad desde el externo punto de vista de un hombre. Funciona, con el sello autoral del director, el terror funciona, aunque el final esté cogido con pinzas. Acaba siendo, en líneas generales, una película fabulosa. 

10. Tick, Tick... Boom! (Lin-Manuel Miranda)

Un emocionante e inmersivo musical que llega al corazón y se queda a vivir. Lin-Manuel Miranda, que este año ha estado del todo ocupado entre esta cinta, Encanto y En un barrio de Nueva York (Jon M. Chu), lo da todo en esta adaptación del extraordinario musical de Jonathan Larson, interpretado por un magnífico Andrew Garfield. Este, desata su poderío interpretativo con una actuación muy expresiva y para nada contenida. Una película realista y con un toque esperanzador, aunque agridulce, de cara al final. Una explosión de emotividad y buen rollo que nadie se debería perder.

9. Boiling Point (Philip Barantini)

Esta es una de esas películas que suelen pasar de largo y luego se descubren como peliculones. Un plano secuencia de 92 minutos en una cocina hasta arriba de estrés. Una maravilla de filme que es una adaptación a largometraje de un corto del mismo director/actor. Y hablando de actores, vaya año el de Stephen Graham, siendo bajo mi punto de vista su mejor interpretación esta. La rompe, qué manera de expresar con la mirada y con el lenguaje corporal. La película mediante los detalles visuales y el sonido hace que sea una experiencia inmersiva para el espectador estar viéndola, lo sumerge en el estrés y la ansiedad de sus personajes y los hace quererlos y odiarlos. Hace vivir al espectador todo lo que sucede, lo hace vibrar.

8. The Innocents (Eskil Vogt) 

Segunda película dirigida por el guionista de El amor es más fuerte que las bombas (2015), Thelma (2017) y La peor persona del mundo (2021). Promesa y realidad del cine noruego, narra una historia tan peculiar de manera muy pausada y con una fotografía y un sonido muy cuidados. Como si los héroes que conocemos con sus superpoderes en pleno despertar se hubieran criado en la isla de ¿Quién puede matar a un niño? (Chicho Ibáñez Serrador, 1976), eso es esta cinta. Destaca por la dirección de actores; los niños están realmente asombrosos, totalmente creíbles en su drama. Inmisericorde y cruel. The Innocents pone el foco en los pequeños y no lo aparta, ellos son los importantes, ellos son la razón de ser de la cinta. 

7. Espíritu Sagrado (Chema García Ibarra)

Un filme imposible. Lento, extraño y sórdido, muy sórdido. Rara en fondo y forma, esta película explora unos caminos que con el plot twist final demuestra que nunca exploró del todo, que la respuesta siempre estuvo ahí, en tus narices. Riega la cabeza de sus espectadores con detalles, diálogos y actuaciones que parecen sencillas pero que son demenciales. No diré más, tan solo hay que verla, vivir esa experiencia.

6. El último duelo (Ridley Scott)

De las dos películas que ha estrenado este año, indudablemente nos tenemos que quedar con esta. Una obra maestra de su género. Mira que a mí no me suelen gustar las cintas ambientadas en la Edad Media o en entornos o contextos bélicos. Pero es que esta, con su estructura Rashomon, logra despertar pasiones. Es dura de ver, desde luego, porque vemos una violación desde tres puntos de vista, pero es una delicia en lo visual y en lo épico. Y tiene un duelo final... de los mejores jamás filmados, qué visceralidad.

5. Benedetta (Paul Verhoeven)

Verhoeven demuestra que, junto a otros grandes como Scorsese o Spielberg, está en plena forma con esta suerte de nunsploitation lésbico y gore. Si está en un puesto tan alto es porque aúna muchas cosas que a mí me gustan mucho: la crítica a la Iglesia, la religión católica como medio para hacer política, sangre, sexo, imágenes oníricas, humor... mucho humor. Humor para romper el hielo, para fortalecer relaciones entre personajes, para dar un tono más realista a una situación. Y las escenas sexuales no están vistas desde un punto de vista morboso, si no más bien desde un punto de vista íntimo y curioso. Una cinta fantástica que no es, desde luego, para todo el mundo. 

4. Spencer (Pablo Larraín)

Atormentado retrato de unos días en la vida de la princesa Diana de Gales. Un drama que en sus picos más altos muta a desesperanzador thriller psicológico. Kristen Steward se desenvuelve con maestría como Lady Di, con gestos muy sutiles y miradas muy profundas que ven más allá de lo que parece, que saben más de lo que aparentan. La banda sonora de Jonny Greenwood junto a las imágenes que diseña en cámara Larraín (de quien solo había visto Ema, de 2019) crean una estética muy única con textura muy noventera pero elegantísima, por supuesto. Una película impecable que merece la pena ser vista.

3. The Sparks Brothers (Edgar Wright)

No voy a engañar a nadie, tengo 22 años y no conocía a Sparks, de hecho los conocí este año gracias a la peli Annette (Leos Carax), pero es que a partir de este documental se han convertido en mis personas favoritas. Edgar Wright nos cuenta en más de dos horas la historia de este peculiar y sensacional dúo musical con un ritmo acojonante y una pasión muy evidente y desbordada. Y ya sabemos que las cosas con pasión salen bien. Un documental con carisma y personalidad, y con total seguridad el más divertido que he visto nunca. 

2. El amor en su lugar (Rodrigo Cortés)

Hermosa y muy cruda. Una película de contrastes, muy distinta a lo que nos tiene acostumbrados Rodrigo Cortés, con un tono muy íntimo y sensible, trata con respeto y realismo a sus personajes y su contexto. Puro dinamismo y emoción a flor de piel. Los actores actúan, aunque la muerte los rodeé, hacen tan solo lo que saben hacer: actuar. Esta es la premisa esencial de la cinta, y sobre ella se edifica una historia a tiempo real en la que los personajes se ven envueltos en un intenso día distinto dentro de su gris rutina. Amor, humor Wilderiano, musical, metatexto... lo tiene todo. Una dirección excelente con unos planos secuencia que quitan el hipo y una música de Víctor Reyes que es una delicia. Un peliculón.

1. Titane (Julia Ducournau)

Fascinante segunda película de la gran cineasta francesa. Una cinta violenta y desagradable a la vista que nos habla del amor propio, de la aceptación (propia y del otro también) y que toca de pasada un tema tan poco manejado en el cine como la identidad de género. Una cinta sobre los cambios y el asumir y normalizar el dolor y la pérdida. Las emociones en la carne, en el cuerpo. Y está tratado todo con bastante más cercanía y menos crudeza de la que se podría esperar, pero hay escenas muy duras y muy difíciles de ver, que son Cronenberg puro. Vemos notables influencias de Crash (Cronenberg, 1996), Christine (John Carpenter, 1983), El tercer hombre (Carol Reed, 1949), Mario Bava, el nuevo extremismo francés, etc. Está estupendamente estructurada y dirigida con muy buen pulso por Julia Ducournau. La fotografía es impresionante y los protagonistas están increíbles. Sin dudas, para mí, la mejor película del 2021.



Películas que casi entran en la lista:

-Mad God (Phil Tippett)
-Destello Bravío (Ainhoa Rodríguez)
-Old (M. Night Shyamalan)
-A Classic Horror Story (Roberto De Feo y Paolo Strippoli)
-Fue la mano de Dios (Paolo Sorrentino)
-The Card Counter (Paul Schrader)
-Val (Ting Poo y Leo Scott)
-Maixabel (Icíar Bollaín)
-El prófugo (Natalia Meta)
-West Side Story (Steven Spielberg)
-Silent Night (Camille Griffin)
-Distancia de rescate (Claudia Llosa)



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